miércoles, enero 31, 2007

Carta a la UNAM.

Para empezar te mando un gran saludo y un abrazo.

En verdad no se por donde empezar, no se que decirte, tengo millones de palabras que quiero decirte y otras tantas que te mereces, creo que lo más propio es decir GRACIAS, GRACIAS por todo lo que me has dado, que me has brindado y que he disfrutado gracias a ti.

Sabes una cosa?, te quiero mucho, eres y serás el parte aguas de mi vida, no creo que te preguntes por que gracias, pero si es así, tratare de decirte por que:

Gracias por haberme acogido en tus instalaciones durante 8 años, y espero que lo sigas haciendo, Ya que desde que entre la ENP número 5 “José Vasconcelos”, te empecé a conocer, empecé a saber de ti ya desde a dentro me fuiste construyendo y me guiabas, después de esos tres años de cambios y de innumerables historias, me aceptaste en tu casa más grande en Ciudad Universitaria que en mi vida había pisado pero que pronto me dejaste conocer ubicándome dentro de las instalaciones de la FCA y en una carrera privilegiada dentro de tus filas, la de informática dando en mi confianza, en que soy capaz de muchas cosas.

Gracias por la educación, por las lecciones, por todo aquello que me has enseñado, que me has transmitido, a través de tus recursos, de tus docentes, de tus alumnos, de tus trabajadores y hasta de tus directivos, gracias por todo lo que has aportado para darme conocimientos y bases para defenderme y sobretodo para quitarme la venda de la mediocridad y enseñarme que el mundo va mas allá de mi vista y de lo que pueda llegar a pensar y crear.

Gracias por los regaños, por todos esos escarmientos que me has dado cuando me he equivocado pero siempre con el afán de darme cuenta de mis errores, de mis equivocaciones y de mis actos erróneos, que tal vez en su momento me produjeron un coraje contra ti, pero que después de pensar y de ver atrás veo el por que lo hiciste y que hoy me sirven para no volver a cometer errores del pasado y saber pensar las cosas cuando es necesario.

Gracias por los amores repentinos y los que se quedaron en lo recuerdos a través de tus instalaciones, y de lo que jamás contaras de lo que paso, nunca con el afán de perderte respeto pero se que entiendes esas hormonas incontrolables.

Gracias por darme muchas cosas que tal vez no merecía, unas instalaciones donde estudiar, material gratuito, enseñanzas que valen millones, lugares donde recrearme solo o con los amigos, paisajes espectaculares, comidas con sabores algo raros pero especiales para nutrirme y para que mi estomago aprendiera a resistir cualquier cosa.

Pero muchas, muchas gracias por las personas que me dejaste conocer, por los que se volvieron amigos, banda, confidentes, compinches. También gracias por esas personas ogetes que conoce uno aquí, por que se perfectamente que me instruyes para que pueda convivir con gente así en los lugares de trabajo, por lo que agradezco el que me hayas presentado esas personas que no me querían ver triunfar y ahora se tienen que conformar que a pesar de sus obstáculos llegue a una meta más, y que de alguna forma se vuelven ayuda por que hoy en día les puedo decir: “no que no putos (benjamín, D…., etc) llegue.” Pero también gracias por esas personas que tal vez no conviví mucho pero que de alguna forma ayudaron escolar, profesional o personalmente para que sea lo que soy hoy. Gracias por darme a conocer maestros que saben demasiado y aunque exigen es un placer estar con ellos (Chabela, Yolix), por lo que te enseñan que las cosas son tan fáciles (Fuse), por los que tal vez su enseñanza es el conocimiento de la vida (Heron, Doc, Mejía), por los que saben pero jamás encuentran la forma de trasmitirte todo (Rita), por lo que siempre me alentaron a seguir, por todas esas personas extraordinarias que son tus profesores que sean como sean, siempre dejan algo en uno.

En si gracias por todo, por lo que soy, por lo que he logrado, por el hoy, por el ahora, y por el futuro incierto por todo solo puedo decir Gracias y espero un día poderte regresar algo de lo que tu me has dado.


Te quiero Mucho.



ATTE: Diego Alejandro Gutiérrez Rodríguez.





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